Es sábado por la noche, llevamos algunas semanas confinados y, cómo mucha gente en España (la mayoría), nuestro grupo de amigos ha decidido tomar una copa “virtual” y hacer un brindis por Teams. ¿Por qué os cuento mi vida?
Como expertos cualitativos siempre decimos: las reuniones de grupo (y añado, esto incluye los workshops) son una reproducción social de los discursos y comportamientos que hay en la sociedad.
Porque nuestro cerebro utiliza los recuerdos y las emociones de lo que vivimos ahora para afrontar las experiencias en el futuro. En ese sentido, lo que hacemos en nuestra vida personal se refleja en otros contextos (en este caso, el trabajo).
Entonces, ¿qué podemos aprender de los encuentros con amigos para dar consejos sobre los workshops online?
La primera “copa electrónica” es un poco extraño, la sensación que tenemos es que no es lo mismo… Pero en la segunda reunión ya nos soltamos más, quedamos durante más tiempo y nos da la sensación de estar más cerca. Ya no parece una “llamada colectiva” sino una reunión más natural, como si hubiéramos quedado en un lugar concreto.
- Lo mismo pasa con los workshops online: en los proyectos que estamos realizando (workshops creativos y de activación), la participación ha cambiado mucho durante los últimos meses. Después de un período de adaptación, vemos que los participantes hablan más fácilmente y interactúan con más energía, se sienten más cómodos…
Tengo que admitir que a veces es cómodo no encender la cámara en una reunión. Sin embargo, si realmente queremos que la gente se involucre, es fundamental vernos; la comunicación no-verbal es importante para cualquier tipo de comunicación y la imagen es la que nos ayuda a acercarnos lo máximo posible al calor humano del contacto físico.
Aun así, el tiempo que pasamos juntos es menos que antes… Estar mirando una pantalla durante muchas horas cansa y ya no tenemos encuentros de 4 horas…
- También lo aplicamos a los workshop: para mantener la concentración y la energía, partimos las sesiones en franjas de 2 horas, para evitar que las personas se desconecten mentalmente…
Cómo en cualquier reunión de amigos, hay cambios de energía, conversaciones serias, bromas y risas, momentos de reflexión….
- …Si relacionamos esto con las sesiones de trabajo, podemos aumentar la productividad considerablemente. En Kantar aplicamos los principios de la gamificación y el pensamiento lateral a través de herramientas como energizers, rompehielos, juegos, plantillas, cuestionarios y ejercicios creativos para involucrar a los participantes, manejar la energía de la reunión y hacer que sea más eficaz.
- Tal como mezclamos el mundo virtual con el mundo offline en las reuniones con amigos (cada uno toma su copa en casa pero hacemos un brindis a través de la imagen), lo aplicamos también al mundo de los workshops – intentamos mezclar el uso de las herramientas online – como las “pizarras digitales” – con tareas que tienen que hacer los participantes en casa (escribir, dibujar, hacer un collage, role playing…)
Os podría dar muchos más ejemplos y consejos pero en también en este caso escucho al consejo de ser breve y cierro este post diciendo que en Kantar hemos visto que, aplicando todos los principios (y otros), los workshops online son una forma muy eficaz de crecer el negocio:
- Alineamiento de equipos
- Activación de Insights (por ejemplo, creando estrategias de comunicación y de marca)
- Generación de ideas y soluciones (por ejemplo para mejorar el Customer Journey, Innovar)
- Desarrollo de conceptos
- Fomentar el trabajo en equipo y las relaciones entre departamentos